Los dientes son la carta de presentación de nuestra sonrisa y nos dan seguridad a la hora de hablar y sonreír, el factor principal es el estado de salud de los dientes, pero en cuanto a estética, el color es fundamental. Hay diferentes factores que influyen para que se oscurezcan, desde la edad hasta ciertos alimentos:
El oscurecimiento de los dientes no solo se produce de forma natural con el paso de tiempo, sino que también el propio desgaste y fricción entre los mismos produce en muchos casos pequeños traumas que alteran el aspecto del diente.
En cuanto a los alimentos, el vino (tanto el tinto como el blanco, aunque sobre todo el primero) por su acidez y la presencia de taninos y cromógenos, dan un tono púrpura y oscurecen los dientes; el café también por su alta concentración de cromógenos y por tener un alto consumo diario por la mayor parte de la población. Las bebidas azucaradas, energéticas y gaseosas son uno de los grandes enemigos para el buen aspecto de los dientes, a parte de por la amenaza que supone para la aparición de caries. Las bebidas energéticas, además, tienen un alto contenido en ácidos y afectan principalmente al esmalte.
Tanto en niños como en adultos, para prevenir la caries dental, el uso de crema dental que contiene flúor también puede tener un efecto adverso: Aparición de manchas en los dientes permanentes.
Aunque en alguna ocasión puede provocar algo de dolor (puede producir algo de sensibilidad al frío, el dulce y alimentos ácidos, aunque a los pocos días desaparece y hay geles especiales para evitarlo), un blanqueamiento dental no es una experiencia dolorosa. Es un tratamiento no invasivo que además se realiza en poco tiempo.
El blanqueamiento no es un tratamiento para toda la vida, pero si se siguen una serie de recomendaciones y hábitos, puede durar bastante tiempo una vez alcanzado el tono que queremos.
El blanqueamiento dental puede eliminar la mayor parte de las manchas dentales, sobre todo las decoloraciones que ocurren en la capa más externa del diente, el esmalte, pero siempre debe de hacerse bajo la supervisión de un odontólogo, que será quien valore la conveniencia o no de un blanqueamiento dental y cuál será la planificación de las sesiones.